El libro sin nombre

Querido lector.

Durante siglos una librería perdida en el mundo ha escondido un secreto. En sus estantes hay un misterioso libro sin nombre ni autor. Quien lo lee… acaba muerto. ¡Sólo las almas puras pueden ver las páginas de este libro! Ahora es tu turno. Cada página que pases, cada capítulo que leas, te acercará al final. Vendrá la oscuridad, y con ella grandes males.

Pero recuerda: todas las personas que han leído El libro sin nombre están muertas. La única forma de saber por qué es leerlo tú mismo… ¡Suerte!

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• Título: El libro sin nombre
• Autor: Anónimo
• Año de publicación: 2007
• Género: Thriller, comedia negra, sobrenatural, misterio
• Editorial: Grupo editorial Tomo S.A. de C.V.

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Va pasando una tranquilamente por las estanterías de la librería cuando de pronto un libro sin nombre, escrito por un autor anónimo y que además advierte que no lo leas si no quieres terminar muerto aparece salvajemente. Creo, sin temor a equivocarme, que la mayoría de las personas sentirían un aguijonazo de curiosidad con tan misteriosa premisa y obviamente yo no fui la excepción. Mordí el anzuelo.

Y no me arrepiento en lo absoluto.

Debo comenzar diciendo que este libro es un poco… diferente. En sus páginas no encontrarás ninguna maravilla literaria, una prosa inteligente o una entrañable moraleja; en cambio, sí que hallarás acción, brutalidad, asesinatos, maldiciones, sangre (mucha sangre), eventos sobrenaturales y una generosa cantidad de humor negro que podría incomodar a más de uno, pero todo en una trama que resulta de lo más fascinante y que engancha prácticamente desde el primer capítulo.

Todo inicia en Santa Mondega, una ciudad olvidada de Dios que no puede ser encontrada en mapa alguno (aunque por ese tenue aroma a viejo oeste uno se imagina que está en algún lugar fronterizo entre México y EE.UU.) y en donde la ley el orden brillan por su ausencia, mientras que las matanzas, robos y violaciones son el pan de cada día. Uno de los bares más concurridos del lugar es el Tapioca, el cual además de ser el preferido de los más sanguinarios criminales es famoso por haber tenido entre sus clientes al Bourbon Kid, un invencible y despiadado pistolero que se convirtió en leyenda por masacrar a más de trescientas personas tras beber su copa de bourbon para después desaparecer sin dejar rastro.

Cinco años después del incidente perpetrado por el Bourbon Kid (cuyo nombre aún aterroriza a los lugareños), una serie de atroces asesinatos que han tenido lugar en Santa Mondega consiguen despertar el interés del gobierno y envían a un joven agente de la división de fenómenos sobrenaturales  para investigar los extraños sucesos, que no por casualidad coinciden con el robo de un enigmático diamante azul y con un inminente eclipse solar, a la vez que corre el rumor de que el temible Bourbon Kid ha vuelto.

No quisiera decir mucho más para no estropear la trama. Si bien es un libro muy sencillo de leer, escrito de forma bastante informal y ligeramente descuidada, con capítulos cortos pero dinámicos y un lenguaje un tanto vulgar (hasta la más dulce abuelita de Santa Mondega se lee escapa alguna palabra malsonante) es condenadamente adictivo e impresionantemente difícil que llegue a aburrir a alguien. La ambientación tiene mucha personalidad y consigue combinar distintos estilos que convergen naturalmente, sin mencionar que está lleno de referentes a la cultura popular más clásica.

La constante intriga y las escenas de acción proporcionan una sensación estimulante que mantiene al lector pegado a las páginas hasta el final. Todo el tiempo está sucediendo algo, todo el tiempo hay un nuevo misterio por resolver, todo el tiempo la mente del lector estará trabajando para intentar descifrar lo que ocurre en esta iracunda y violenta ciudad.

Uno de sus puntos fuertes es el amplio y estrambótico grupo de personajes que le dan vida a la historia. Ninguno cuenta con un gran desarrollo o complejidad y gracias a la narración en tercera persona es complicado definir quién es el verdadero protagonista, ya que prácticamente todos son directa o indirectamente relevantes. Sin embargo esto hace que se convierta en una verdadera delicia contemplar cómo el destino va entrelazando sus hilos hasta hacerlos colisionar en el peor escenario posible. Además, sin importar cuán malvados e inmorales parezcan (vamos, que aquí no hay un solo personaje «bueno»), todos tienen su encanto y sin duda alguno terminará por cautivar al lector.

Y por si esto fuera poco, el misterioso autor aún hoy continúa en el anonimato. El libro sin nombre comenzó como un relato publicado en internet hasta que una editorial británica reconoció su potencial, aunque incluso ellos desconocen la identidad del Señor Anónimo y aseguran que reciben sus manuscritos por correo.

Esto ha dado pie a un sinnúmero de especulaciones sobre quién podría ser el reservado escritor y entre los sospechosos se barajan desde Dan Brown y Quentin Tarantino hasta el mismo Stephen King. Vaya, incluso una chica se me acercó en la cafetería en donde yo leía para asegurarme que un tío suyo lo había escrito. Yo me inclino más por el director, ya que El libro sin nombre tiene harto sabor a sus películas (sobre todo a Kill Bill o Pulp Fiction), pero definitivamente no pondría mis manos al fuego. Podría ser el tío de aquella chica, después de todo.

En realidad este es el primero de una serie de cuatro libros conocida como la Saga del Bourbon Kid (o Kid Bourbon, depende de la edición), lo que es una fortuna considerando que el final es algo abrupto y algunos cabos quedan sueltos en esta entrega

Hablando en términos más subjetivos este libro me hizo entrar un estado de hype en su momento (al grado de que, en cierta forma, estuvo a nada de darle nombre a este blog) y encontrarlo hace unos días mientras «ordenaba mi habitación» (¡Ja!) hizo que me entrasen unas ganas incontenibles de volver a leerlo, consiguiendo de paso que pospusiera la lectura de libros con, digamos, más contenido. Y en el remoto caso de que alguien quisiera hacerme un regalo, una camiseta con la imagen del Bourbon Kid como la de arriba es mi sueño frustrado. 

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En fin, que El libro sin nombre no es algo que recomendaría a todo el mundo. El argumento no es profundo y tampoco busca serlo, pero entretiene bastante, así que si te gusta la acción, el misterio, los antihéroes, las criaturas de la noche como dios manda y ¿por qué no? la sangre, este libro te dejará suficientemente satisfecho.

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Extra

El misterioso autor anónimo (conocido en las redes sociales como @BourbonKid) tuvo la consideración de visitar y compartir esta humilde reseña. ¡Muero de felicidad!